En la tarde-noche del viernes 20 de mayo, se ha celebrado la segunda edición del cross urbano de Estepa, prueba que discurre por el casco antiguo de la ciudad y que cuenta con lugares espectaculares y de gran dureza.
Con multitud de participantes que colaboraban con una causa solidaria, se celebraban todas las categorías inferiores para dar comienzo a la prueba absoluta, que en esta edición se ha acercado a los 800 participantes entre la opción de carrera o de andar, debiendo completar una distancia de 6.500 m. aprox.
Me desplazaba hasta allí y me encontraba con varios compañeros de Herrera y de localidades vecinas. Se daba la salida cuando estaba anocheciendo y el ritmo inicial era brutal, siendo los primeros metros en bajada. Al llegar a la avenida de Andalucía, comenzaba a estirarse el grupo, marchándose en cabeza los hermanos estepeños José Antonio y Samuel Moreno, junto al joven herrereño Cristóbal Domínguez. Tras ellos, marchaba en solitario el pedrereño Vicente Jiménez, al que seguíamos mi compañero Edu Moreno y yo. La carrera se rompía de inicio y le comenté a mi compañero que iba a poner un ritmo exigente en el tramo de llano de la avenida para que cuando afrontáramos la subida a la torre de la victoria y posteriormente al cerro, llegáramos con crédito para no sufrir mucho. Edu aceptó y conseguimos distanciarnos unos metros de un grupo que nos seguía, compuesto por Manuel Gómez, Manuel Barrionuevo, Luis Jiménez, David Linares, Esteban Pino y Manuel Ruiz.
Llevábamos controlada la prueba, ya que Vicente, que nos precedía, se iba marchando poco a poco de nosotros y nosotros hacíamos lo propio con nuestros perseguidores. Sobre el km 2'5, al finalizar la avenida y girar para Los Remedios, nos ocurrió que cuando había que girar hacia la derecha, buscando el cuartel de la guardia civil, dos jóvenes nos dijeros que era hacia adelante. Entre la oscuridad y la distancia que nos llevaba el cuarto clasificado que no lo veíamos, seguimos, aunque yo le dije a Edu que el año anterior era por la calle de abajo. Hubo otro compañero de Pedrera que nos vio y siguió tras nosotros. Tras pasar dos calles en subida, nos quedamos parados, porque no veíamos a nadie y giramos a una calle que buscaría el cuartel de la guardia civil, pero rodeándolo por arriba. Nos dimos cuenta que la prueba no era por este recorrido, aunque seguimos hacia delante y al llegar al inicio de Roya, vimos a unos 100 metros al grupo de Luis Jiménez y demás compañeros.
Yo le dije a Edu, que iba a finalizar la prueba a un ritmo más suave, pero él me insistió en seguir competiendo lo que pudiéramos. Así que, los tres atletas que nos habíamos perdido comenzamos a marcar ritmo fuerte para intentar contactar con el grupo de delante. El ritmo que marcaba Edu oscilaba en torno a 3,28-3,30 por km y le dije que iba muy justo, pero él insistía que debíamos contactar con el grupo de atletas de delante antes de comenzar la subida más dificultosa. Llegábamos a la plaza del ayuntamiento y contactábamos con el grupo de delante justo al comienzo de la subida. Edu intentó avanzar posiciones y yo cerraba el grupo. Los primeros escalones se hicieron a un ritmo muy fuerte, aunque mis sensaciones eran malas, mentalmente quería, pero las piernas no respondían, aunque me aferré al grupo. Al finalizar los escalones, comenzaba un falso llano, donde Edu conseguía ponerse en cabeza del grupo y yo avanzar algunas posiciones justo antes de comenzar la siguiente subida. En esa subida y con deuda de oxígeno, me mentalicé para marcar un punto más en el ritmo, lo que me permitió superar a Luis Jiménez y contactar con Edu en la cabeza del grupo. Justo al coronar, en el momento que el cuerpo debía recuperar, impuse otro cambio de ritmo y Edu me dijo que me marchara en solitario, aunque le dije que se esforzara que ahí era la única parte que quedaba para correr, porque lo demás era todo bajada. Así que se puso tras de mí no nos marchamos del grupo, llegando posteriormente la bajada y con muchos problemas en las callejuelas para hacer los giros, que al no estar indicadas, debíamos parar y arrancar continuamente, aunque ya llegamos a meta manteniendo la posición. Seguidos muy de cerca por Luis y los demás compañeros.
Una vez en meta, Vicente que iba cuarto, se había equivocado de calle y entraba detrás, varios atletas habían llegado con antelación, aunque desde la organización nos dijeron que la clasificación quedaba de la siguiente forma:
1º José Antonio Moreno; 2º Cristóbal Domínguez; 3º Samuel Moreno; 4º Vicente Jiménez; 5º y 6º con el mismo tiempo Edu y yo; 7º Luis Jiménez; y así sucesivamente.
El reloj nos marcó 6.700 m. en 26 min. 06 seg. (3'54'' por km).
Al final, disfrutamos de una gran prueba, con multitud de anécdotas que le daban más emoción.
